Las palabras suelen ser semillas
que del corazón emergen/
Verdores que promueven edenes
de valles ensoñados.
Simiente son/ de ríos/
buscando en su cauce destino de mar.
El sembrador es poderoso pintor de nubes.
Aguila de las cumbres
sabedor de soledades.
Suele estar hundido su silencio
en la sed del corazón.
Su corazón es pozo de cristal
que la lengua del sol husmea.
Pudiese acaso
(¡Quien sabe!)
cambiar la luz mezquina del mundo.
Los ojos de la noche destilan/
el rocío de su llanto.
¡Pero no es verdad
que fueron vencidas
las flores en el desierto!
Palpitan aún las palabras...
Porque de la abundancia del corazón
habla la boca.
Ator: Juan Carlos Luis Rojas